Donde todo empieza y todo acaba.
El lugar al que siempre estás deseando volver, ese que puedes considerar hogar.
Donde el mar de habla de su silencio.
El sitio perfecto para encontrarte de nuevo.
Ese lugar es el Hotel Altonadock Faro de Lariño.
La primera vez que lo vimos lo sentimos, esa conexión con la naturaleza